Los frutos secos ayudan a perder peso

Que los frutos secos engordan es un mito muy extendido. El alto contenido en grasa es el responsable de este mito. Una ración de unos 30 gramos de frutos secos sin freír, ni añadir sales ni azúcares, aporta entre 160 y 180 kilocalorías.

Los frutos secos ayudan a perder peso

En los últimos años numerosos estudios han desmentido el mito de que los frutos secos engordan, sin embargo muchos aún lo desconocen.

La última investigación al respecto, publicada en la revista científica Nutrition&Metabolism arroja un resultado inequívoco: "El consumo de frutos secos puede ser beneficioso en la prevención del síndrome metabólico y el sobrepeso". Es decir, el consumo de frutos secos no solo no engorda, sino que, además puede ayudarnos a adelgazar dentro, por supuesto, de una dieta saludable.

Otros estudios anteriores llegaron a la misma conclusión. En 2017 la revista European Journal of Nutrition publicó otro estudio que concluyó que una mayor ingesta de frutos secos se asocia a un menor riesgo de sobrepeso u obesidad frente a aquellas personas que no incluyen este tipo de alimentos en su dieta.

El origen de este mito se encuentra seguramente en que los frutos secos son ricos en grasas. Aunque es cierto que tanto las almendras, como las nueces o los pistachos son alimentos con una gran cantidad de calorías, no se puede valorar si un alimento es sano o no solo a través de su cantidad de calorías.

Los frutos secos son alimentos muy ricos en grasas poliinsaturadas como el ácido linoléico o linolénico. Ambos son fundamentales y nuestro cuerpo no las puede sintetizar. Por otro lado también son ricos en ácidos grasos monoinsaturados, que aumentan los niveles de HDL (el colesterol bueno).

Además del tipo de grasa que aportan a nuestra dieta, los frutos secos también tienen un alto contenido en fibra y un gran efecto saciante.